El escritor español Juan Goytisolo (1931-2017), en la portada del segundo volumen de sus Obras completas: Narrativa y relatos de viaje (1959-1965), en Galaxia Gutenberg.
RECORDANDO A JUAN GOYTISOLO
Siempre me gustó
este escritor intuitivo, diferente, comprometido, defensor hasta sus últimos
días de la lengua como signo de libertad, sin concesiones a la galería y a las
modas. Escribiendo sin aspavientos, con humildad y mucha clarividencia, esa que
deja pasos bien dados y aprendidos, huellas imperecederas, acertó a dejarnos obras relevantes. Siempre me gustó,
sí, este hombre sensible y desubicado, cuya lectura primera descubrí allá por
los años setenta, asumiéndola como sorpresiva experiencia (radicalmente innovadora)
en la literatura castellana contemporánea que se escribía por aquellos años. Juan Goytisolo fue un andante
peregrino que fue recogiendo palabras como entusiasta colegial, aún a sabiendas de que
desaparecerían como lo han hecho tantas otras en el tiempo, las suyas quizás
con la misma muerte, inevitables destinos y cambios que se producen en toda
lengua.
Es resbaladizo
opinar sobre un escritor y su obra sin el beneficio de la perspectiva que nos
conceden las mareas del tiempo, porque es fácil caer en el entusiasmo tras lo
leído llevados por el pulso de la admiración hacia el hombre. Pero no creo
equivocarme al decir que Juan Goytisolo permanecerá en las páginas sacras de
nuestra mejor literatura, como una mirada lúcida y renovadora de las mismas, aun
habiendo sido voluntarioso exiliado huyendo de fanatismos, galardones y
prebendas. Juan Goytisolo personifica,
como pocos, el genio literario, la figura del intelectual comprometido
dispuesto a condenar las actitudes reaccionarias e inflexibles, como el
nacionalismo separatista que suele llevar el
burdo y peligroso disfraz del adoctrinamiento sectario cuando no también
el de la ignorancia. Quizás por eso el tema de la inmigración -riqueza de
diversidad-, así como las preocupaciones por las actitudes, los prejuicios xenófobos
y el control de las minorías, ha sido una constante denuncia en su obra, tanto en
su creación literaria más personal como la de articulista crítico con su
tiempo.
Juan Goytisolo es
un narrador que fue formulando, libro a libro, una nueva propuesta moral y proposición
estética, planteadas con el más decidido propósito de barrenar en la escritura
el soporte del lenguaje dominante, a menudo rancio y represivo.
Barcelona. Marzo del 2020.
©Teo Revilla Bravo.
Después de lo que expones con honda admiración, solo queda dejar uno de esos poemas en donde el poeta deja ver su pensamiento sobre la libertad del ser humano... o la falta de ésta.
ResponderEliminarEN ESTE MISMO INSTANTE...
En este mismo instante
hay un hombre que sufre,
un hombre torturado
tan sólo por amar
la libertad. Ignoro
dónde vive, qué lengua
habla, de qué color
tiene la piel, cómo
se llama, pero
en este mismo instante,
cuando tus ojos leen
mi pequeño poema,
ese hombre existe, grita,
se puede oír su llanto
de animal acosado,
mientras muerde sus labios
para no denunciar
a los amigos. ¿Oyes?
Un hombre solo
grita maniatado, existe
en algún sitio. ¿He dicho solo?
¿No sientes, como yo,
el dolor de su cuerpo
repetido en el tuyo?
¿No te mana la sangre
bajo los golpes ciegos?
Nadie está solo. Ahora,
en este mismo instante,
también a ti y a mí
nos tienen maniatados.
Felicitaciones, besitos.
La equivocación, disculpas, nos permite al menos indagar un poco en la poética de su hermano José Agustín.
ResponderEliminarLo que no es poco, Karyn. Fue un poeta singular, muy aclamado y leído en los años sesenta, setenta... Paco Ibáñez se hizo eco musicándole "Palabras para Julia", precioso y sensible tema. Los tres hermanos Goytisolo se dedicaron a la literatura.
EliminarUn abrazo.