La pasarela del amor —o del desatino—
que juntos atravesamos sobrevivientes,
nos deja a veces incierto pasaje, dudoso
tiempo de nieblas, larga distancia.
Invariable el pájaro asoma pausado
y remolón, conteniendo su ansiedad
entre los ramales de luz que crecen
y mueren en dudosa esperanza.
Pero nada de todo eso importa si entre
afecto, luz y sombra, captando el ritmo
brioso y atemperado de la fresca brisa
de hoy, conectada entre hilos de amor
a mí pese a todo abismo existes.
Que preciosidad de poema, Teo. Has descrito magistralmente el amor que sale a nuestro encuentro y nos envuelve con su lazos sutiles. Si tenemos la osadía de cruzar esa pasarela, todo lo que describes acude a nuestro encuentro sin duda. Siempre es un placer leerte, querido amigo.
ResponderEliminarY para mí recibir tus comentarios tan cálidos como alentadores, amiga Mari Paz. Muchísimas gracias.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Si el amor late en el corazón, en realidad no se requiere pasarela alguna, porque es tan grande el sentimiento que todo lo envuelve. Son hermosos tus versos, son sin duda la red que nos protege en medio del abismo. Besitos
ResponderEliminarCierto. La pasarela sirve para unir dos amores que intentan encontrarse como sea., es ese lazo de unión que puede hacerlo posible. Lo difícil, a veces, es dar con ella.
EliminarBueno, me enrollo, un abrazo.
Encerrados en estos versos late el amor Teo."pese a todo abismo existes" Preciosas palabras
ResponderEliminarSutil y delicado poema .Un gusto pasar y leerte.
Un abrazo
Puri
Muchas gracias, Puri, por entrar en estas líneas y recorrerlas dejando constancia con tan cálidas palabras que son siempre un gran estímulo. Que no nos falte el verso.
EliminarUn abrazo.