ENTRE PALABRAS Y SILENCIOS

lunes, 12 de abril de 2021

LA MUERTE

 


"Autorretrato con la muerte tocando el violín" (1872)  Obra de Arnold Böcklin, pintor suizo encuadrado en el simbolismo, de gran influencia en el posterior movimiento surrealista.






LA MUERTE

 

“En la vida no vamos hacia donde queremos,

sino hacia donde el destino nos lleva.”

 

La muerte, con sus trenzadas ligaduras,

escudriña en torno a la mejor manera

de desenmascararnos, de volvernos 

tierra doliente, alarma, lapidario, polvo,  

orden o caos acomodado al sinsentido humano.

 

Misterio.

Derribo.

Descarnación.

Futilidad.

Destrucción.

 

¿Acaso no sientes su presencia, acaso no su furtiva 

mirada? Es un frío que hiela la sangre, que nos deja 

indefensos haciéndonos ver que  la destrucción 

es algo que abrumados o no hemos de encarar.

 

Sin embargo, es tan hermosa la vida cuando

contemplamos el mar relajados, el azul del cielo, 

los verdes prados, el arroyo, la delicada rosa 

del jardín, la inocencia en los ojos de un niño, 

el beso a la amada, que preferimos pensar 

en construir territorios fértiles y en abrir 

meritorias puertas  a la esperanza.



“Océanos de luna”

Cuaderno  VIII. (1984-1987

©Teo Revilla Bravo.






6 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Muchísimas gracias, Mucha.
      gracias por tu visita, siempre agradable.
      Un abrazo.

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  2. La imagen, gráfica. El poema, certero, en poesía. ¿La realidad?...

    Personalmente, a día de hoy, consciente, no me planteo la muerte... La sé ahí, sin duda, pero lejana e intrascendente. Hoy no está. Y el "mañana", volverá a ser el "hoy" del "ayer". Todo es un juego de palabras.

    Y a un nivel de realidad más profunda, ¡ni juego hay!

    Pero mientras llega, a la vida de cada cual, bienvenida sea la poesía, los poetas, la pintura, el arte, la cultura... El motor de la humanidad.

    Gran abrazo Teo.

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    1. Hay que vivir cargados o cargándose de optimismo, Ernesto. Me alegra tu reflexión sobre la vida, sobre la muerte, indivisibles pues una es consecuencia de la otra.

      Muchísimas gracias por tu visita, siempre es un placer leerte, escucharte desde letras tan cabales como certeras y amigas.

      Un abrazo.

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  3. La vida y la muerte son parte del mismo juego, todos sabemos que la vida comporta el camino y la muerte es el fin. Quisiéramos algunos que ese fin llegara cuando ya no fuéramos conscientes y nos dejáramos ir por un bello sueño, otros en cambio ni quieren pensar en ello ni mentarlo. Todo es válido, pero en todo caso, lo mejor es disfrutar del camino, hacerlo nuestro, sentirlo al máximo y quizás incluso, creer en que nada termina del todo, que parte de nosotros ha quedado en quienes nos han querido, que hemos sembrado en nuestros hijos, nietos y amigos, por lo que de alguna manera estaremos vivos más allá de nuestra propia muerte. Besitos

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    1. Karyn Huberman Ciertamente es así: la vida se propaga incesantemente desde su principio en un sin fin de acontecimientos. Esa es su ley y en ella nuestro destino señalado. Vivirla con intensidad, generosidad y gratitud, es lo único humanamente que podemos hacer. La muerte cierra el ciclo individual, pero no el colectivo.
      Fuerte abrazo.

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