En la cueva Sibudu, Sudáfrica, se encontró una mezcla de pintura de ocre y leche de bóvido en un fragmento de una herramienta de piedra. Se calcula que tiene unos 49.000 años nada menos. Luego, hace miles y miles de años, el hombre prehistórico ya hacía pintura a base de leche, lo que da idea de la magia y de la sorpresa que este proceso producía en nuestros antepasados. De ahí hasta la fecha, el arte como necesidad de expresión, por fortuna ha sido una constante imparable.
EL ENCANTAMIENTO EN EL ARTE.
¿Cómo canalizar el
presente del arte, cómo considerar su acontecer
en general, hacia dónde se dirige? La
historia del arte se abre a ramificaciones como si fuera un árbol enorme,
hermoso, complejo. Hay formas del arte, que en su novedad no se sabe muy bien
dónde ubicarlas, qué estilo asignarlas,
a qué esfera incumben. El arte es un proceso en constante construcción, que en
principio genera mucha incertidumbre y confusión. Al ser novedoso, ante su
tenacidad y persistencia hay que darle
alguna respuesta crítica, a menudo sin saber de dónde partir para no fallar en
el intento, pues nunca se está preparado para valorarlo de inmediato ya que requiere
un período de reflexiva adaptación. Es el tiempo, su fugacidad y acabamiento, el
encargado de ir filtrándolo para que de él quede la esencia de lo permanente.
En todo caso, lo importante es que siga ocupando, en el devenir humano, el lugar
privilegiado que como foco cultural le corresponde.
El mundo de los
sentimientos, de la intuición, de la sensibilidad y del mismo pensamiento, ha de contrarrestar
el lado más racional y lógico de la vida, teniendo el debido anclaje en nuestra
formación como personas. Las cosas que vemos, aquello que consideramos propicio,
conforman una disposición al sentimiento que los convoca, y ésta, a través de la
elaboración orillando conflictos que surgen, produce arte.
Necesitamos del
ensueño, del encantamiento, de la admiración, de la contemplación de lo bello e
incomparable, para lograr ser y sentir hondamente. En la raíz de toda
composición artística hay dos aspectos que son como la cara y la cruz de la
moneda: sentimiento e intuición. Con eso ha de trabajar y crear su obra el artista,
y luego mostrarla y entregarla para que sean otros quienes la juzguen, al fin y
al cabo el arte y la cultura son un producto social que no debe medirse por lo
fácil o difícil, pues entra dentro de la suma histórica de acontecimientos y conocimientos en una tarea
constante por ir transformando alquímicamente la naturaleza del hombre, haciendo que
pueda vivir lo más plenamente que pueda no solo en el orden material, sino que
también en el espiritual. Esa es la gnosis del encantamiento y ensimismamiento aquí
esbozado, o lo que es lo mismo, del hecho artístico. Indudablemente, el arte
caminará al lado del hombre siempre. Irá donde éste vaya, dándole sentido y
asiento a medida que se revele y logre objetivarse en el plano oculto y
transcendente de la realidad.
Barcelona, febrero de
2019.
©Teo Revilla Bravo.
Cada uno de nosotros ve al arte de una manera diferente Es como la belleza de una mujer o de un hombre. Depende de los ojos del que lo mira.
ResponderEliminarIndudablemente, amiga Mucha, que cada uno ve y siente el arte desde sus entrañas, con esa sensibilidad especial y única que posee. También es cierto que hay un arte que queda porque lo hemos heredado condicionados por todo el bagaje cultural y crítico que con él va. Lo maravilloso es descubrirlo con la máxima pureza y limpieza con que pueden verlo nuestros ojos.
EliminarUn abrazo.
Desde el inicio de los tiempos el hombre ha querido reproducir el entorno, la figura humana, las acciones de estos y también con el tiempo los sentimientos más abstractos. Fundamental el sentimiento y la intuición, también una base de conocimiento que nos guíe en el primer trayecto, el esbozo mental, el dibujo equilibrado para luego derramarnos en la obra. Un artista no crea pensando si gustará o no a otros, él es el primero que juzga su obra, el primero que siente si ha llegado o no a término, el primero que debe sentir ese encantamiento del que hablas en tu escrito. Besos
ResponderEliminarAsí es. Algo, no se sabe bien qué, un motivo aparentemente insignificante, la visión de algo, puede ser la espoleta que abra la caja mágica del arte y lo ponga en acción. Bello comentario.
EliminarUn abrazo.
Pintaba ya no pinto más. Esculpía... mis manos son para el tecleado now . Cambiamos de acuerdo a como vemos la vida, nuestras etapas nuestras penas y alegrías.
ResponderEliminarLo bueno Teo es no juzgar. Porque cuando uno juzga larga de adentro rabias ocultas. Lo mejor... descubrir palabras nuevas para dar . Y aceptar si otros ven la vida de un color diferente al que uno quiere pintar... Morning to you
Pues, sí: muy de acuerdo Mucha. Descubramos nuevas palabras, nuevas pasiones, nuevas obras que iluminen el camino del hombre.
EliminarGracias.
Hola Teo, la pregunta que haces al comienzo de esta entrada es difícil de responder. El ser humano necesita rodearse de lo bello y desde tiempos remotos siempre lo buscó.
ResponderEliminarEl arte como tu dices encierra sentimiento e intuición, y es el artista quien nos hace con su obra partícipes de ambas cosas.
Un abrazo Teo.
Puri
Sí, Puri, todo en arte -como en tantas otras cuestiones- es difícil de responder, estamos llenos de dudas, éstas nos persiguen desde que nacemos. Pero la intuición, el sentimiento, la capacidad de admirar algo, es propio. El arte solamente requiere algo de eso; y si es todo. mejor que mejor.
EliminarUN agradecido abrazo.
Morning to you...
ResponderEliminarEnsueño, encantamiento,admiración,intuición algunas de tus palabras que amo..
Las mias son..
Vida esperanza el hoy del momento, salud es belleza y encanto la magia que siento.. Buen jueves para vos
Igualmente, Mucha. Sé feliz.
EliminarBien conciso, hasta breve, para la magnitud del tema que logras transmitirnos tan bien. Sabes expresarte, amigo, y hacerte entender muy bien. Si tuviese que contestar la pregunta con que inicias...no sé...bueno, sí sé, porque algo me conozco: empezaría a emborronar cuartillas hasta nunca acabar, o trataría de escribir un poema —donde no me veo en la obligación de hacerme entender—. Esta peculiaridad es lo que más admiro de tu decir. En fin, en buen cubano: nos la pones fácil.
ResponderEliminarAbrazos
Me encanta que lo expreses en buen cubano, amigo José. Esa libertad para componer a la que aludes emborronando cuartillas, es realmente la esencia de todo arte. Aunque, como bien dices, a nadie aparentemente interese o logre comprender.
EliminarGracias y un fuerte abrazo.